La cera en los oídos es algo totalmente natural. Es un mecanismo corporal para evitar que las bacterias, el polvo y la suciedad entren en los oídos. Lamentablemente, muchas personas piensan que la cerilla es una suciedad y una grasa innecesaria y la eliminan todos los días. La peor parte es que la cera se elimina con un hisopo de algodón, que no ayuda a eliminar la cera, sino que solo la empuja más profundamente en la parte interna del oído, junto con las bacterias.
No mucha gente sabe que el exceso de cerumen se elimina por sí solo. Cuando, por casualidad, eso no ocurre, por cualquier motivo, puede experimentar dolor en los oídos, problemas en los senos nasales, dolores de cabeza o incluso mareos, y daños en la audición.
Por suerte para nosotros, hay una solución que nos dio un médico.
David Hill, un médico, nos aconsejó tomar un poco de vinagre y un poco de alcohol en cantidades iguales (pequeñas cantidades) y mezclarlos, luego gotear la mezcla en el oído.
Debe mantener la cabeza en posición supina durante un minuto y luego levantarla, dejando que el líquido se escurra.
Es una mezcla milagrosa, porque te alivia de los síntomas antes mencionados. Desbloquea la cera y la expulsa, por lo que sus oídos se liberan de la desagradable ocurrencia.
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