Es muy frustrante sacar una de tus camisas favoritas de la secadora solo para descubrir que se ha encogido. Afortunadamente, hay varias maneras diferentes que puedes probar para estirar la tela y regresar la camisa a su forma original. Lávala de nuevo para mojarla y después tira de ella para estirarla un poco. Si quieres estirar la tela de manera significativa, también puedes remojar la camisa en acondicionador para el cabello y después estirarla. Para asegurarte de que ninguna camisa se encoja de nuevo, lávalas con agua fría y no uses la secadora.
Estirar la camisa con las manos
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Lava la camisa en la lavadora o a mano. Estirarla con las manos es mucho más efectivo si la tela está mojada. Usa agua fría cuando laves la camisa para evitar que se encoja aún más.
- Si lavas la camisa a mano, asegúrate de exprimir el exceso de agua antes de estirarla. Sin embargo, no estrujes la tela. En lugar de eso, solo aplica presión sobre la camisa.
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Coloca una toalla limpia sobre una superficie plana. Debe haber suficiente espacio para extender la camisa sobre la toalla. Extiéndela toda y asegúrate de que la tela no tenga pliegues o arrugas.
- Extiéndela boca arriba de manera que puedas ver el cuello.
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Deja secar al aire la camisa sobre la toalla. Una vez que hayas tratado de estirarla, déjala secar antes de revisar si ha funcionado. Podría tomar varias horas para que se seque por completo, así que ten paciencia.
Usar acondicionador o vinagre para estirar la camisa
- También puedes usar champú para bebé en lugar de acondicionador. Ambos soltarán las fibras de la camisa y resultarán más fáciles de manejar.[7]
- El acondicionador para el cabello también funciona bien para otros materiales sintéticos como el nailon.