Cuando el hígado está lleno de toxinas, no puede realizar sus funciones correctamente, por lo que la grasa comienza a acumularse y el cuerpo se vuelve graso. Esta bebida permite que en pocos días este órgano tan importante, también llamado “filtro del cuerpo”, descanse y se purifique.
Cuando el hígado está sobrecargado, comienza a engordar y se depositan toxinas en él. La gente no tiene en cuenta el hecho de que un hígado limpio es probablemente el factor más importante para determinar si es posible perder peso.
Si está tratando de perder peso y sus intentos anteriores no han tenido éxito, pruebe esta receta y realice una desintoxicación completa del hígado. Bebe la bebida durante 3 días y límpiala de todas las sustancias que la ralentizan y dificultan su trabajo.
Como la bebida es un diurético bastante fuerte, se recomienda no beberla durante más de tres días. Para obtener los mejores efectos, debe tomarse con el estómago vacío, 3 veces al día, media hora antes de las comidas principales.
Evite las comidas pesadas durante estos 3 días mientras realiza la terapia. Consume alimentos frescos y saludables para aliviar la cirrosis hepática e intensificar el proceso de adelgazamiento. Recuerde beber más líquidos, especialmente agua.
Ingredientes: 3 limones, 1 taza de perejil picado, 5 tallos de apio, 6 tazas de agua.
Preparación: Muela el jugo de limón, el perejil y el apio en una licuadora y luego agregue agua y mezcle bien. Agregue 2 tazas, 3 veces al día con el estómago vacío. La terapia tiene una duración de 3 días, luego tome un descanso de 7 a 10 días y repita el tratamiento una vez más.
Ingredientes: 3 limones, 1 taza de perejil picado, 5 tallos de apio, 6 tazas de agua.
Preparación: Muela el jugo de limón, el perejil y el apio en una licuadora y luego agregue agua y mezcle bien. Agregue 2 tazas, 3 veces al día con el estómago vacío. La terapia tiene una duración de 3 días, luego tome un descanso de 7 a 10 días y repita el tratamiento una vez más.
La enfermedad del hígado graso se puede tratar adoptando una determinada dieta y cambiando los hábitos de vida. Lea el siguiente artículo para obtener más información sobre los efectos de los limones, las peras y las fresas en el hígado:
Limón para limpiar el hígado graso
Bebe diariamente un vaso de agua mineral mezclada con jugo de limón y ayúdate muy rápidamente en el tratamiento de las enfermedades del hígado graso. El limón es un gran ingrediente detox, rico en vitamina C y ácido cítrico. Pero el secreto mejor guardado de los limones hasta ahora es que es una ayuda digestiva que ayuda a su cuerpo a descomponer rápidamente los alimentos en el estómago.
Debido a esto, su proceso de digestión es mucho más simple y eficiente. Resumiendo hasta ahora, el limón es un arma poderosa que estimula la digestión saludable y protege el hígado con los ácidos que contiene.
Las peras no solo contienen una gran cantidad de nutrientes, sino que también son una fruta dulce y refrescante. Las peras son un ingrediente ideal en las dietas para adelgazar porque contienen una gran cantidad de agua y dan energía a tu organismo. También tienen una gran cantidad de fructosa (azúcar de fruta), lo que los convierte en un elemento básico en la dieta de las personas con diabetes.
Las peras también contienen el porcentaje perfecto de fibra soluble e insoluble que ayuda a eliminar el colesterol y regular los procesos intestinales (digestivos) en el intestino. Y, por supuesto, ayudan con el estreñimiento debido a la pectina que contienen.
Un dato interesante es que comer dos peras al día le proporcionará el 20% de la cantidad diaria recomendada de vitamina C, aproximadamente el 10% de la cantidad diaria recomendada de ácido fólico, así como una gran dosis de complejo de vitamina B (B1, B2 y en menores cantidades B3 y B6) y vitamina E.
Todos estos hechos hacen que las peras sean un gran ayudante para el hígado. Sus ácidos orgánicos los convierten en un remedio natural para los dolores de estómago, aumentando la secreción de jugos gástricos. Al mismo tiempo, este proceso ayuda a limpiar el páncreas y el hígado.
El jugo de melón y las semillas de papaya son un gran remedio natural para reducir el colesterol y el hígado graso. Beber este jugo a diario es una excelente manera de limpiar el hígado y reducir los depósitos de grasa que se han acumulado a su alrededor.
Beber un vaso de este jugo todas las tardes puede ser muy útil para tratar la enfermedad del hígado graso. Ingredientes: dos trozos de melón, un vaso de agua fresca, dos o tres semillas de papaya.
Procedimiento: Pon todos los ingredientes anteriores en una licuadora y licúa bien. No intente tragar semillas de papaya, sino mastíquelas lentamente mientras bebe el jugo.
Además de ser deliciosas y dulces, las fresas son un remedio increíble para limpiar el hígado y desintoxicar tu cuerpo. Las fresas contienen fibra, vitamina C y un antioxidante que no solo protege su cuerpo, sino que también fortalece su sistema inmunológico.
Las fresas también tienen una alta concentración de agua y ayudan a retener líquidos en el cuerpo, reducen la hipertensión. Además de los beneficios anteriores, al incluir las fresas en su dieta, compensará la ingesta diaria de potasio, magnesio, hierro, fósforo, yodo y calcio. Cuando está en temporada, se recomienda que coma de siete a ocho fresas al día.