Los científicos no tienen dudas de que el azúcar es el culpable de al menos la mitad de todos los problemas de obesidad. Es esta sustancia la que también es responsable del drástico aumento del riesgo de diabetes tipo 2 y problemas con el sistema cardiovascular.
El exceso de azúcar puede manifestarse en resfriados más frecuentes, aumento de la actividad alternando con períodos de apatía, puede causar infecciones por hongos, y cambios de humor.
El exceso de azúcar está relacionado con el c*ncer, las enfermedades cardíacas y las enfermedades renales.
No es cierto que las bebidas, los zumos, los cereales para el desayuno o incluso los yogures de frutas con azúcar añadido sean saludables para nosotros. Los azúcares en sí no son un problema, pero el azúcar que se nos da en los productos altamente procesados es una sustancia claramente diferente del azúcar de las verduras o frutas frescas, e incluso de los productos lácteos.
El exceso de azúcar reacciona negativamente con las bacterias que viven en nuestro cataplasma digestivo, destruye la flora intestinal beneficiosa, aumenta la concentración de glucosa en nuestra sangre y estimula la acumulación de tejido adiposo, especialmente alrededor del abdomen.
El azúcar que es dañino para nosotros se encuentra mucho en todos los productos altamente procesados, pero también en los alimentos para bebés.
La omnipresencia del azúcar hace que consumamos grandes cantidades y nuestro cuerpo aprenda a absorberlo cada vez con mayor eficacia, lo que aumenta su dosis.
Nos volvemos adictos y, si intentamos combatirlo, comenzamos a sentir los efectos fisiológicos reales de la abstinencia. Nuestro cerebro se reprograma y se niega a volver a la normalidad, pero es posible. Según la investigación, un período de aproximadamente dos semanas sin azúcar es tiempo suficiente para reducir significativamente nuestra adicción al veneno dulce.
La lucha contra el azúcar se puede emprender a partir de una dieta, parte de la cual se presenta a continuación:
Día 1
- Desayuno: 3 huevos duros o un vaso de avena con nueces (o almendras)
- Almuerzo: un tazón pequeño de nueces mixtas.
- Almuerzo: pechuga de pollo con verduras, remolacha, frijoles y nabos.
- Cena: salmón y brócoli al vapor y champiñones.
- También beba al menos 2 litros de agua durante el día.
Dia 2
- Desayuno: 3 huevos revueltos con espinacas o brócoli
- Almuerzo: un tazón pequeño de nueces mixtas.
- Almuerzo: ensalada de repollo con zanahorias, aceite de oliva, sal, jugo de limón, perejil y pimiento amarillo y vinagre de sidra de manzana.
- Cena: bacalao al horno con coles de Bruselas a la plancha y nabos o verduras al vapor con frijoles
- También beba al menos 2 litros de agua durante el día.
Día 3
- Desayuno: 3 huevos revueltos con gambas y nueces con ensalada de rábanos
- Almuerzo: un tazón pequeño de nueces mixtas.
- Almuerzo: pollo asado con aceitunas, tomillo y cebolla.
- Cena: arroz negro con tomates, champiñones y albahaca o carne en salsa de champiñones con ajo, apio, cebolla, zanahoria y tomillo.
- También beba al menos 2 litros de agua durante el día.
Dicha dieta nos permitirá sentirnos diferentes después de aproximadamente 2 semanas, pero para romper con el azúcar adecuadamente, debe soportarlo más tiempo, preferiblemente aproximadamente 2 meses. Durante este tiempo, no se puede tomar descansos ni hacer trampas.
Es importante en este momento renunciar a todos los productos innecesarios y endulzadosmente adicionales, como las bebidas carbonatadas con azúcar, pero también el café endulzado. Con el tiempo, esto dejará de ser un gran problema, porque en condiciones naturales, el cuerpo no necesita un aporte de azúcar de nuestra parte y simplemente tiene que recordar cómo es la normalidad.
Su cuerpo se sentirá más liviano y limpio y su mente estará más aguda. Después de experimentar tales cambios, ¡le garantizamos que nunca volverá a los viejos hábitos!