La dieta de la sopa de repollo, es uno de los métodos más populares para perder peso a corto plazo. Como su nombre lo indica implica comer grandes cantidades de sopa de col, los defensores esta dieta avalan que puede ayudar a perder cerca de 10 libras (4.5 kg) en una sola semana. Sin embargo hoy en día que existen tantas tendencias de nutrición y salud tan innovadoras, diversos especialistas han declarado que se trata de una dieta poco saludable y con resultados poco sostenibles a largo plazo. Si has considerado probar está pauta alimenticia te invitamos a seguir leyendo, con el objetivo de conocer sus beneficios, contraindicaciones y así tomar la mejor decisión para tu salud.
¿En qué consiste la dieta de la sopa de repollo?
La información sobre el origen de está dieta es escasa, lo que se sabe es que empezó a ganar popularidad desde la década de 1980 y se ha mantenido desde entonces. A lo largo de este tiempo ha pasado por momentos de mayor auge y en los últimos años ha vuelto a tomar relevancia.
Esta dieta también se conoce con otros nombres, entre los que se destacan: La dieta del Hospital del Sagrado Corazón y la dieta de la Clínica Mayo, la teoría dice que fue un plan alimenticio creado en un hospital para que los pacientes perdieran peso rápidamente previo a alguna cirugía. Lo cierto es que los hospitales implicados han negado dichas afirmaciones.
La dieta se basa en un plan con una duración de 7 días y su principal objetivo es garantizar una rápida pérdida de peso. Funciona mediante el consumo exclusivo de la sopa de repollo casera y se permite por día el consumo de 1 o 2 alimentos más, como es el caso de ciertas frutas, vegetales, carne de res, pollo y arroz integral, en porciones muy controladas y vigiladas.
Según información oficial ubicada en el portal de la Clínica Mayo, es considerada una dieta relámpago y sus resultados también. Si bien confirman sus beneficios para adelgazar, los relacionan directamente con la limitación en la ingesta calórica de forma drástica y aunque reportan algo de pérdida de grasa, lo cierto es que es muy probable que todo el peso que se pierda sea una combinación de agua y grasa. También en algunos casos se puede incluir algo de pérdida de masa muscular, lo cual es considerado un riesgo que se asocia con diversas afectaciones de salud.
Se trata de una dieta muy baja en carbohidratos complejos, proteínas, vitaminas y minerales, es por ello que los especialistas en nutrición y medicina recomiendan realizarla por no más de 7 días y es importante complementarla con un alto consumo de líquidos e infusiones naturales.
¿Cómo se realiza?
Prepararte para llevar a cabo está dieta es bastante sencillo, ya que el paso fundamental es preparar grandes lotes de sopa para consumirla a lo largo de toda una semana. Si bien algunos ingredientes de la receta pueden variar, la versión original es la siguiente:
Ingredientes:
- 2 cebollas grandes
- 2 pimientos verdes
- 2 latas de tomates
- 1 manojo de apio
- 1 pieza de repollo grande
- 3 zanahorias
- 1 paquete de champiñones
- 1-2 cubos de caldo de vegetales (opcional)
- 6 a 8 tazas de agua o jugo de vegetales mixtos (como V8)
- 1 cucharada de aceite de oliva extra virgen
Modo de elaboración:
- Lavar y desinfectar todos los vegetales. Una vez limpios deberás picarlos en cubitos medianos, por separado y resérvalos.
- En una cacerola grande para sopa agrega un poco de aceite de oliva, cuando este caliente sofríe la cebolla y cuando estén acitronadas y ligeramente doradas, agrega el resto de las verduras.
- Añade los cubitos de caldo de vegetales y cubre con agua. Permite que la sopa hierva y reduce a fuego bajo.
- Hierve a fuego lento entre 30-45 minutos, hasta que las verduras adquieran una consistencia tierna.
- Si lo deseas puedes condimentar con un toque de sal, pimienta, hierbas y especias. También está permitido agregar otras verduras sin almidones como es el caso de las espinacas y judías verdes.
Indicaciones de consumo:
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- Durante 7 días consecutivos la base de la alimentación será la sopa de col, está permitido consumirla de manera libre a lo largo del día y en todas las comidas principales.
- Se permite el consumo de máximo dos alimentos al día, adicionales a la ingesta libre de la sopa. Es decir conforme el día se permite el consumo de determinadas variantes de frutas, vegetales, carne de res, pechuga de pollo y arroz integral. Queda prohibido el consumo de cualquier otro grupo de alimentos.
- Consume libremente agua y otras bebidas naturales sin calorías ni endulzantes. Algunas buenas recomendaciones son el té verde, infusión de manzanilla, jengibre, cúrcuma, lavanda y menta.
- Diversos especialistas recomiendan el consumo de algún multivitamínico durante los 7 días que se realice la dieta, ya que puede ser baja en nutrientes.
Reglas de la dieta de la sopa de repollo:
- Día 1: Sopa de repollo y fruta ilimitadas, no plátanos.
- Día 2: Solo sopa y verduras. Se deberá basar la dieta en el consumo de verduras de hoja verde crudas o cocidas. Evita los guisantes, el maíz y los frijoles. Se permite el consumo de una papa al horno con mantequilla o aceite de oliva.
- Día 3: Frutas y verduras de manera libre, además de la sopa. Queda prohibida la ingesta de papas y plátanos.
- Día 4: Plátanos ilimitados, leche descremada y sopa de repollo libremente.
- Día 5: Se permiten de 10 a 20 onzas (280 a 567 gramos) de carne de res, se pueden sustituir por pollo o pescado. Se pueden complementar con 6 tomates al día y lechuga.
- Día 6: Sopa libre, pollo a la plancha y verduras de hoja verde. Puede sustituir el pollo por carne o por pescado asado.
- Día 7: Se permite el consumo de verduras, arroz integral, jugo de frutas natural y recién elaborado ilimitado, queda prohibido el consumo de bebidas procesadas y azucaradas.
La dieta deberá durar únicamente 7 días y es posible repetirla cuando se considere necesario, con un intervalo de entre 2-3 semanas de diferencia.
Conclusiones:
No se cuenta con referencias científicas que avalen los beneficios de la dieta de la sopa de repollo, lo cierto es que al ser un plan alimenticio muy bajo en calorías se garantiza la pérdida de peso. En particular, cuando restringe severamente la ingesta de calorías o pierde mucho peso, el cuerpo responde reduciendo la tasa metabólica, reduciendo la cantidad de calorías que quema por día.
Lo cierto es que se cuenta con estudios que avalan los beneficios de las dietas bajas en calorías y de corto plazo, para disminuir temporalmente la resistencia a la insulina, aunque se consideran muy breves para producir grandes cambios en la grasa corporal. También en el caso de personas obesas las dietas muy bajas en calorías por períodos entre 4 y 12 semanas, se relacionan con mejoras significativas a corto plazo en la pérdida de peso y la salud metabólica.